Tesla cierra su superordenador Dojo tras seis años de desarrollo
Tesla desmanteló el proyecto y disolvió el equipo en agosto de 2025. Elon Musk calificó a Dojo como un «callejón sin salida evolutivo». La decisión representa un cambio estratégico en sus ambiciones de Inteligencia Artificial.
El final del camino para Dojo
Tesla decidió el mes pasado cerrar Dojo y disolver el equipo detrás del superordenador en agosto de 2025. Dentro de semanas de proyectar que Dojo 2 alcanzaría escala para 2026, Musk revirtió el curso, declarando que era «un callejón sin salida evolutivo». El líder de Dojo, Peter Bannon, dejó la compañía, siguiendo la partida de alrededor de 20 trabajadores.
La apuesta fallida de Tesla
Dojo era el superordenador de Tesla construido a medida diseñado para entrenar sus redes neuronales de «Conducción Autónoma Total» (FSD). Fortalecer Dojo iba de la mano con el objetivo de Tesla de alcanzar la conducción autónoma completa y llevar un robotaxi al mercado. Sin embargo, Tesla no atribuyó sus éxitos de conducción autónoma al superordenador.
Un giro hacia los partners
El cierre se produjo un par de semanas después de que Tesla firmara un acuerdo de 16.500 millones de dólares para obtener sus chips de próxima generación AI6 de Samsung. Musk declaró que «una vez quedó claro que todos los caminos convergían en AI6, tuve que cerrar Dojo». Algunos analistas ven esto no como un fracaso, sino como un pivote estratégico hacia un camino optimizado que confía en partners para el desarrollo de chips.
La promesa de una compañía de IA
Musk ha insistido en que Tesla no es solo un fabricante de automóviles, sino una compañía de IA. El argumento era que el software de IA entrenado por Dojo se enviaría eventualmente a los clientes de Tesla mediante actualizaciones over-the-air. La escala de FSD significaba que Tesla podía acumular millones de millas de metraje de video para entrenar el sistema.
El futuro se escribe con AI6
El cierre de Dojo señala el fin de una apuesta de alto riesgo por el hardware autosuficiente. Tesla ahora apuesta todo a las asociaciones con Nvidia, AMD y Samsung, que construirá su próximo chip AI6. La eficacia de esta nueva estrategia definirá la capacidad de Tesla para competir en el ámbito de la inteligencia artificial.