
Investigadores han creado una herramienta basada en inteligencia artificial que podría revolucionar la detección temprana de problemas cognitivos. ¿Podría el análisis del sueño ayudar a prevenir la demencia?
Cómo la IA Puede Detectar Signos Tempranos de Deterioro Cognitivo
Un equipo de científicos de Mass General Brigham ha desarrollado una herramienta de inteligencia artificial (IA) capaz de predecir el deterioro cognitivo mediante el análisis de las ondas cerebrales durante el sueño.
Utilizando electroencefalografía (EEG), una técnica que mide la actividad eléctrica del cerebro, la IA es capaz de identificar patrones sutiles que podrían anticipar la aparición de problemas cognitivos antes de que los síntomas sean evidentes.
Esta innovación podría representar un gran avance en la detección temprana de enfermedades neurodegenerativas, permitiendo intervenciones más oportunas para frenar su progresión.
El Estudio Detrás del Descubrimiento
La investigación fue liderada por Shahab Haghayegh, PhD, del Massachusetts General Hospital y Harvard Medical School, con la colaboración de otros expertos como Kun Hu, PhD, y Susan Redline.
El estudio se basó en datos de 281 mujeres mayores de 65 años, inicialmente sin signos de deterioro cognitivo. A lo largo de cinco años, los investigadores analizaron su actividad cerebral durante el sueño y realizaron evaluaciones cognitivas periódicas.
Principales hallazgos:
✔ El 34% de las participantes desarrolló deterioro cognitivo en cinco años.
✔ La IA identificó el 85% de estos casos con una precisión del 77%, analizando solo una noche de sueño.
Estos resultados sugieren que la actividad cerebral nocturna podría contener claves esenciales para anticipar problemas neurológicos.
¿Cómo Puede Esto Cambiar la Detección y Prevención de la Demencia?
Uno de los aspectos más prometedores de esta tecnología es su potencial aplicación en dispositivos EEG portátiles, como aquellos utilizados en estudios del sueño en casa.
Si esta tecnología se perfecciona y se vuelve accesible, podría permitir:
🔹 Diagnósticos más tempranos: Detectar problemas cognitivos antes de que los síntomas sean evidentes.
🔹 Intervenciones personalizadas: Implementar cambios en el estilo de vida y tratamientos preventivos para frenar el deterioro.
🔹 Seguimiento continuo: Monitorizar la salud cerebral a lo largo del tiempo sin necesidad de pruebas invasivas.
El hecho de que solo una noche de sueño haya sido suficiente para hacer predicciones precisas abre la puerta a la posibilidad de usar esta tecnología en exámenes de rutina, facilitando la detección temprana en personas con riesgo de desarrollar demencia.
Limitaciones y Próximos Pasos en la Investigación
A pesar de sus prometedores resultados, el estudio presenta algunas limitaciones:
📌 La investigación solo incluyó mujeres y se centró en un grupo poblacional específico.
📌 Los datos se basaron en una sola noche de estudio, por lo que se necesita analizar la actividad cerebral durante múltiples noches para confirmar la fiabilidad de los resultados.
Para mejorar la precisión de la herramienta, los investigadores planean expandir el estudio a poblaciones más diversas y evaluar cómo el EEG puede aplicarse en diferentes contextos.
Además, están explorando si ciertas intervenciones pueden modificar la actividad cerebral durante el sueño y ralentizar el deterioro cognitivo, lo que podría abrir la puerta a nuevas estrategias de prevención.
Si se perfecciona y se implementa ampliamente, esta tecnología podría convertirse en un método accesible y no invasivo para la detección temprana del deterioro cognitivo, ofreciendo a millones de personas la posibilidad de actuar antes de que la enfermedad avance.