Mike Moritz tilda de extorsión la nueva tasa de 100.000 dólares para visados H-1B
Una nueva tasa anual de 100.000 dólares para visados H-1B, anunciada por la administración Trump, ha sido calificada de «esquema de extorsión brutal» por el capitalista de riesgo Michael Moritz. El impuesto afecta a empresas que contratan trabajadores extranjeros cualificados.
Crítica desde el sector tecnológico
En una columna en el Financial Times, el veterano inversor comparó la medida con las tácticas del personaje Tony Soprano. Moritz argumenta que la política perjudicará a Estados Unidos al incentivar que las compañías trasladen puestos de trabajo a otros países como India o Polonia.
Argumentos en contra de la medida
Según Moritz, el gobierno malinterpreta el motivo por el que las empresas tecnológicas contratan talento extranjero: se trata de cubrir una falta de profesionales cualificados, no de reemplazar trabajadores estadounidenses. Asegura que ingenieros de universidades de Europa del Este o India están tan cualificados como sus homólogos locales.
Propuesta alternativa
El capitalista de riesgo, que llegó a EE. UU. con un visado similar en 1979, aboga por expandir el programa H-1B. Sugiere duplicar o triplicar el número de visados o conceder la ciudadanía automáticamente a extranjeros que obtengan un doctorado STEM en universidades estadounidenses. Señala a CEOs como Satya Nadella (Microsoft) o Sundar Pichai (Google) como ejemplos de éxito del programa.
Repercusión en la industria
La medida afectará principalmente a empresas tecnológicas, principales usuarias del visado H-1B que permite la entrada de 85.000 trabajadores cualificados al año. La crítica de una figura tan relevante como Moritz pone de manifiesto el desacuerdo del sector con la política migratoria.
Un precedente controvertido
La administración Trump anunció la tasa el pasado viernes. La nueva normativa aplica un coste significativo a la contratación de talento internacional, un pilar para muchas compañías de tecnología en Estados Unidos.
Futuro incierto para la contratación
La advertencia de Moritz sugiere que la consecuencia inmediata será la externalización de trabajo a centros en el extranjero. Esto podría tener un impacto a largo plazo en la competitividad de la industria tecnológica estadounidense al dificultar la retención de talento global.