Karen Hao compara a OpenAI con un imperio por su poder e ideología de la AGI
OpenAI ha consolidado un poder superior al de muchos estados, según la periodista Karen Hao. Su libro ‘Imperio de la IA’ analiza cómo la compañía ha reconfigurado la industria con su misión de alcanzar la Inteligencia General Artificial.
El coste de la obsesión por la velocidad
La autora señala que la compañía priorizó la velocidad por encima de la seguridad, la eficiencia y la investigación. Esta estrategia, definida como “la victoria para quien llegue primero”, impulsó un crecimiento exponencial con grandes demandas de recursos.
Repercusión en la industria y la academia
OpenAI marcó la pauta y otras empresas tecnológicas decidieron seguirla. La industria capturó a la mayoría de los principales investigadores de IA, por lo que toda una disciplina queda moldeada por la agenda empresarial y no por la exploración científica.
Inversiones astronómicas y daños colaterales
Los gastos son enormes: OpenAI prevé gastar 115.000 millones de dólares para 2029. Mientras, los daños aumentan, como la pérdida de empleos o la concentración de riqueza. Hao documenta trabajadores en países en desarrollo expuestos a contenido perturbador y con salarios muy bajos.
Antecedentes de la misión de OpenAI
OpenAI describe la AGI como un sistema altamente autónomo que supera a los humanos en la mayoría de trabajos económicamente valiosos, con el objetivo declarado de “elevar a la humanidad”.
Implicaciones de un imperio tecnológico
La estructura híbrida de OpenAI, entre sin ánimo de lucro y con ánimo de lucro, complica cómo define y mide su impacto. El reciente acuerdo con Microsoft acerca a la compañía a una eventual salida a bolsa, lo que genera preocupación entre algunos exinvestigadores sobre una posible confusión de misiones.