Microsoft evita sanción de la UE al desvincular Teams de Office
La Comisión Europea cierra su investigación antimonopolio tras aceptar los compromisos de la tecnológica. La empresa se compromete a ofrecer sus suites sin la aplicación de mensajería a un precio menor y a garantizar la interoperabilidad durante los próximos años.
Un acuerdo para desbloquear la competencia
Gracias al compromiso de desvincular su aplicación de mensajería corporativa Teams de sus suites de productividad, Microsoft ha logrado eludir sin daños una importante investigación antimonopolio por parte de la Comisión Europea que podría haber resultado en multas masivas. La Comisión aceptó el viernes las concesiones de Microsoft para abordar las preocupaciones de competencia de la UE.
Los términos del pacto
Microsoft ha prometido que durante los próximos siete años, proporcionará Microsoft 365 y Office 365 sin Teams a un precio menor y permitirá a los clientes elegir si desean pagar más para añadir la aplicación de colaboración. Además, la compañía ha accedido a abrir sus API para permitir la interoperabilidad con herramientas de mensajería de terceros y a permitir la exportación de datos de Teams durante los próximos cinco años.
El origen de la disputa
La investigación, iniciada en 2020 tras quejas de la aplicación rival Slack, acusaba a Microsoft de infringir las normas de competencia al agrupar Teams con sus suites de productividad, abusando de su posición dominante y otorgando a Teams una ventaja indebida, especialmente por su integración con otras aplicaciones como Excel, Outlook, SharePoint y Word.
Una batalla que se evitó
Microsoft intentó mitigar estas preocupaciones con una desvinculación parcial de Teams en abril de 2024, pero la Comisión consideró que se necesitaban cambios más extensos. La empresa presentó un plan revisado en mayo de 2025. Esta aprobación es un ganar-ganar para ambas partes, ya que la Comisión obtiene un gran compromiso y Microsoft elude medidas punitivas y una multa potencial de hasta el 10% de sus ingresos globales anuales.
El contexto de la lucha antimonopolio en Europa
La investigación de la Comisión Europea se enmarca en los esfuerzos continuos de la UE por garantizar una competencia leal en el mercado digital. El caso fue impulsado por quejas de empresas competidoras como Slack y Alfaview, que alegaban que las prácticas de Microsoft impedían una competencia efectiva en el crucial mercado de las herramientas de comunicación y colaboración empresarial.
Un mercado que se abre a la elección
El cierre de la investigación significa que la Comisión hace vinculantes los compromisos de Microsoft durante siete años o más. Como declaró la vicepresidenta ejecutiva de la Comisión, Teresa Ribera, esta decisión «abre la competencia en este mercado crucial y garantiza que las empresas puedan elegir libremente el producto de comunicación y colaboración que mejor se adapte a sus necesidades».