Apple implementa nueva tecnología de seguridad en sus últimos iPhone
La función MIE protege contra vulnerabilidades de memoria explotadas por spyware. Diseñada para los nuevos iPhone 17 y iPhone Air, dificulta la labor de empresas de vigilancia y forenses. Expertos la consideran un avance significativo en seguridad móvil.
Un escudo contra la explotación de la memoria
Apple ha presentado Memory Integrity Enforcement (MIE), una tecnología que busca detener los errores de corrupción de memoria, algunos de los fallos más comunes aprovechados por los desarrolladores de software espía y los fabricantes de dispositivos forenses. Según la compañía, esta medida se dirige específicamente a las cadenas de spyware mercenario.
Un cambio de reglas para los atacantes
Investigadores en ciberseguridad afirman que este avance elevará el coste y el tiempo necesario para desarrollar exploits para los iPhone más nuevos. Un experto anónimo declaró que el iPhone 17 es probablemente «el entorno informático más seguro del planeta que aún está conectado a internet». Esto se traduce en precios más altos para los clientes que compran estos exploits.
Impacto en el mercado del spyware
La profesora Jiska Classen confirmó que MIE reducirá la eficacia de los hackeos, tanto remotos (como los lanzados con Pegasus de NSO Group) como físicos (realizados con hardware de desbloqueo como Cellebrite o Graykey). Esto podría dejar temporalmente sin exploits operativos a algunos vendedores de spyware.
La batalla tecnológica por la privacidad
La industria del spyware ha explotado históricamente fallos de seguridad en dispositivos móviles para vigilar a objetivos. Las vulnerabilidades de memoria, comunes en muchos lenguajes de programación, han sido la base de la mayoría de los exploits utilizados por estas empresas, permitiendo el acceso no autorizado a datos personales.
Un paso firme, pero no infalible
MIE representa un avance crucial que complicará enormemente la labor de los actores malintencionados, aunque los expertos recalcan que no es una solución a prueba de hackeos. La eficacia a largo plazo dependerá de la adopción de la tecnología por parte de los desarrolladores de aplicaciones y de la continua evolución en este juego del gato y el ratón. Como señaló un investigador, «mientras haya compradores, habrá vendedores».