Tesla propone a Elon Musk un paquete salarial de hasta un billón de dólares
El plan liga la compensación a multiplicar por ocho la valoración de la empresa. La propuesta se votará en la junta de accionistas de finales de este año. Musk había amenazado con abandonar la compañía si no obtenía más poder de voto.
Un plan billonario con condiciones
Tesla ha propuesto un nuevo plan de compensación a 10 años para su Consejero Delegado, Elon Musk, que podría llegar a valer hasta un billón de dólares. El paquete está vinculado al cumplimiento de varios objetivos, entre los que destaca aumentar la valoración total de Tesla de alrededor de un billón a más de ocho billones de dólares.
El precio del control
El plan otorgaría a Musk más de 423 millones de acciones adicionales de la compañía, incrementando su nivel de control hasta aproximadamente el 25%. La propuesta se someterá a votación en la junta de accionistas de Tesla, prevista para más adelante este año.
Un momento crítico para la visión
En un documento presentado ante la Comisión de Bolsa y Valores (SEC), Tesla escribió a sus accionistas que el mundo se encuentra en un “punto de inflexión crítico” y afirmó que puede inaugurar una era de “abundancia sostenible” mediante “la introducción de tecnologías innovadoras y asequibles a escala”. La compañía argumenta que la “visión singular” de Musk es “vital” para navegar este momento.
Compensando el pasado reciente
Los detalles de este nuevo plan llegan solo un mes después de que la compañía anunciara un paquete de compensación de 29.000 millones de dólares destinado a compensar otro plan que fue anulado por un juez en Delaware.
Mirando más allá de los coches
Esta propuesta se produce mientras el negocio de coches eléctricos de Tesla tropieza y la compañía dirige su mirada hacia la robótica humanoide y la Inteligencia Artificial (IA). La empresa citó en su comunicado su recientemente publicado “Master Plan Part IV”.
Una apuesta de valor sin precedentes
La junta de accionistas decidirá si aprueba un paquete que podría convertirse en el más grande de la historia corporativa, condicionando la riqueza de su consejero delegado al crecimiento extremo de la valoración de la empresa en la próxima década.