Vendedores virtuales chinos superan en ventas a humanos reales
Avatares con IA de Baidu y DeepSeek venden productos 24/7 en plataformas de comercio electrónico. La tecnología, desarrollada por la empresa Shanghai PLTFRM, genera scripts y responde a preguntas en directo. Su implementación plantea cuestiones sobre el futuro del sector.
La Revolución del Vendedor Infatigable
Avatares de IA, conocidos como «humanos virtuales», están siendo desplegados en plataformas como Taobao y Pinduoduo. Creados por la empresa de marketing Shanghai PLTFRM, utilizan modelos de vídeo de Baidu y modelos de lenguaje de DeepSeek para generar scripts y interactuar. Venden desde impresoras hasta toallitas húmedas las 24 horas del día, los siete días de la semana. Su actitud estandarizada y su resistencia les permite mantener un rendimiento constante, algo que los humanos no pueden igualar debido al cansancio.
Resultados y Repercusión
La empresa Brother confirmó que su avatar de IA vendió 2.500 dólares en impresoras en sus primeras dos horas y que sus ventas en livestream han aumentado un 30% desde el cambio. Alexandre Ouairy, cofundador de PLTFRM, afirma que «las ventas son mejores… con la persona virtual» porque no se cansa. Para el ciudadano, esto se traduce en una experiencia de compra siempre disponible, pero también en una potencial transformación del mercado laboral en el sector del comercio electrónico.
Un Mercado ya Dominado por el Directo
El contexto de este avance es un mercado chino donde más de un tercio de todas las ventas de comercio electrónico en 2024 ocurrieron en livestreams, según un informe del China International Electronic Commerce Center. Esta tecnología permite a las marcas tener canales de transmisión propios que funcionan todo el año, reduciendo la dependencia de influencers externos y cambiando el modelo de marketing de influencia a marketing directo.
Hacia un Futuro de Transmisiones Interminables
La eficacia de estos avatares, capaces de generar respuestas en tiempo real gracias a los modelos de lenguaje, sugiere una expansión inevitable de la tecnología. Aunque por ahora se centran en plataformas de comercio electrónico en China y no en redes sociales como Douyin, las pruebas en YouTube, TikTok y Facebook indican que su llegada a un mercado global es una cuestión de evolución técnica y adaptación, lo que podría redefinir la interacción entre consumidores y marcas a escala mundial.