Niños estadounidenses opinan sobre el impacto de la IA en su educación
El 26% de los adolescentes en EE.UU. usa ChatGPT para tareas escolares, según una encuesta de 2024. WIRED entrevistó a seis jóvenes sobre cómo la inteligencia artificial afecta su aprendizaje, creatividad y vida cotidiana.
«Si los robots dominan el mundo, quizá me perdonen por decir ‘por favor'»
Los estudiantes reconocen ventajas y riesgos de la IA. Leo Schodorf (15 años) la usa para buscar fuentes históricas o crear tests de estudio, pero advierte: «Si preguntas respuestas en un examen, es hacer trampa». Siddhi Singh (17) valora su eficacia para organizar apuntes, pero critica su uso en redacciones: «Se nota cuando un texto lo escribe la IA».
Preocupaciones éticas y ambientales
Mahawa Kaba (15) rechaza la tecnología por su impacto ambiental y social: «Si usas respuestas automatizadas, acabas pensando como un robot». Nora Pai (14), artista, teme que desvalorice el proceso creativo: «No sentiría satisfacción si la IA dibujara por mí».
Educación pro-IA: «Enseñemos a usarla, no la prohibamos»
Gabrielle Watkins (16) estudia en un instituto que integra IA en las aulas. Defiende su papel para automatizar tareas repetitivas, como analizar datos en geografía, pero pide límites: «Hay que preguntarse: ¿Lo uso para mejorar o por pura pereza?». Finn King (12) critica que el capitalismo haya desviado su potencial: «Podría crear una utopía, pero solo busca ganancias».
De la fascinación a la regulación
En 2023, solo el 13% de los adolescentes usaba ChatGPT para el colegio; en 2024, la cifra se duplicó. Un 25% de los docentes estadounidenses considera que la tecnología causa más daño que beneficio, según Pew Research.
El futuro ya está en sus mochilas
Los testimonios revelan que la IA es una herramienta educativa polarizante. Mientras algunos centros la prohíben, otros la normalizan, dejando a los jóvenes navegar entre la innovación y el riesgo de dependencia.