Karen Hao compara a OpenAI con un imperio por su poder e influencia global
OpenAI ha consolidado más poder que la mayoría de estados-nación, según la periodista Karen Hao. En su libro ‘Imperio de la IA’, argumenta que la empresa actúa como un imperio que remodela la Tierra y reconfigura la geopolítica.
La ideología del AGI como motor de expansión
OpenAI es el principal evangelista de la Inteligencia General Artificial (AGI), un sistema que “superaría a los humanos en la mayoría de trabajos económicamente valiosos”. Esta promesa nebulosa ha justificado una expansión masiva, con enormes demandas de recursos y la liberación de sistemas no probados.
El coste humano y ambiental
Los daños documentados incluyen pérdida de empleos y concentración de riqueza. Trabajadores en países en desarrollo como Kenia y Venezuela estuvieron expuestos a contenido perturbador por salarios muy bajos, entre uno y dos dólares la hora.
La carrera por la velocidad y sus consecuencias
La estrategia de OpenAI priorizó la velocidad sobre la seguridad y la eficiencia. Según Hao, esto llevó a la industria a “capturar a la mayoría de los principales investigadores de IA”, moldeando la disciplina según la agenda empresarial y no la exploración científica.
Antecedentes del gasto en infraestructura
La inversión es astronómica: OpenAI prevé gastar 115.000 millones de dólares para 2029. Meta anunció un desembolso de hasta 72.000 millones este año, y Google prevé hasta 85.000 millones en 2025, destinados principalmente a expandir la infraestructura de IA y la nube.
Implicaciones de un modelo de negocio dual
La estructura híbrida sin ánimo de lucro y lucrativa de OpenAI complica cómo define su impacto. Investigadores de seguridad temen que la empresa confunda ambas misiones, considerando el uso de ChatGPT como un beneficio para la humanidad mientras se acumulan los daños.