Karen Hao compara a OpenAI con un imperio por su poder e influencia global
OpenAI ha consolidado un poder superior al de muchos Estados-nación, según la periodista Karen Hao. En su libro ‘Empire of AI’, argumenta que la compañía actúa como un imperio, remodelando la geopolítica y la vida global en su búsqueda de la Inteligencia General Artificial (AGI).
La AGI como ideología expansionista
OpenAI es el principal evangelista de la AGI, un sistema que definirían como “altamente autónomo y que supera a los humanos en el trabajo económicamente más valioso”. Esta promesa nebulosa justifica la expansión de la industria, a pesar de los daños documentados y el enorme coste económico y medioambiental.
El coste de priorizar la velocidad
La estrategia de la empresa se basa en la velocidad por encima de todo: sobre la eficiencia, la seguridad y la investigación. Hao señala que esto llevó a “hacer lo intelectualmente barato: bombear más datos y más supercomputadoras” con técnicas existentes, en lugar de buscar avances algorítmicos más eficientes.
Repercusión en el ecosistema
Otras compañías tecnológicas siguieron esta estrategia para no quedarse atrás. Meta prevé gastar hasta 72.000 millones de dólares en infraestructura de IA este año, mientras que Google espera 85.000 millones en gastos de capital para 2025. OpenAI anticipa quemar 115.000 millones de dólares en efectivo para 2029.
Daños documentados y beneficios cuestionados
Mientras los grandes beneficios no materializan, los daños aumentan: pérdida de empleos, concentración de riqueza y chatbots que alimentan delirios. Hao documenta trabajadores en países en desarrollo expuestos a contenido perturbador y con salarios muy bajos, de uno a dos dólares la hora, en labores de moderación.
Antecedentes
Karen Hao, periodista y autora del libro ‘Empire of AI’, realizó estas declaraciones en una entrevista para el podcast ‘Equity’ de TechCrunch. En su obra, compara la industria de la IA y a OpenAI en particular con un imperio, analizando su poder económico y político.
Cierre
La estructura híbrida de OpenAI, entre sin ánimo de lucro y lucrativa, complica cómo define y mide su impacto en la humanidad. El reciente acuerdo con Microsoft acerca a la compañía a una eventual salida a bolsa, lo que, según exinvestigadores, podría confundir aún más sus misiones.