Las empresas de IA pierden ventaja frente a las aplicaciones especializadas
Los modelos de base se consideran ahora una mercancía intercambiable. El avance en inteligencia artificial se desplaza hacia el ajuste fino y el diseño de interfaces, reduciendo la ventaja competitiva de los grandes laboratorios.
Un cambio de estrategia en el ecosistema IA
Las startups de IA se centran ahora en personalizar modelos para tareas específicas, viendo el modelo de base como un componente que puede ser sustituido. Este enfoque fue evidente en la conferencia Boxworks, dedicada al software para usuarios finales.
El fin de la ventaja insalvable
Los beneficios del pre-entrenamiento a gran escala han disminuido. El progreso futuro provendrá del post-entrenamiento y el aprendizaje por refuerzo, áreas donde otras empresas pueden competir.
Repercusión para los grandes actores
Compañías como OpenAI, Anthropic y Google podrían convertirse en proveedores de baja marginación. La abundancia de modelos de código abierto les quita poder de fijación de precios si pierden la competencia en la capa de aplicación.
La advertencia de un inversor
El capitalista de riesgo Martin Casado (a16z) señaló que OpenAI perdió categorías que inauguró frente a competidores, concluyendo que «no hay foso inherente en la tecnología de IA».
Antecedentes de la industria
Durante años, el desarrollo de modelos de base fue el único negocio de IA. El rápido progreso hizo que su liderazgo pareciera insalvable, y se asumió que la mayor parte del beneficio económico fluiría hacia ellas por realizar el trabajo más difícil de replicar.
Implicaciones inciertas para el futuro
El panorama competitivo cambia y socava las ventajas de los grandes laboratorios. Aunque estos conservan reconocimiento de marca e infraestructura, la estrategia de construir modelos cada vez más grandes parece menos atractiva y más arriesgada.