Inversión en startups de robótica supera los 6000 millones de dólares en 2025
El capital riesgo invertido en robótica alcanza los 6000 millones de dólares en los primeros siete meses de 2025, según datos de Crunchbase. Este sector, que no se impulsa únicamente por la IA, experimenta un crecimiento histórico tras una década de maduración y abaratamiento de costes de hardware y software.
Una década de aprendizaje que culmina en inversión récord
Los inversores han destinado 6000 millones de dólares a startups de robótica en los primeros siete meses de 2025. Crunchbase predice que la financiación total de este año superará a la de 2024, lo que convierte a la robótica en una de las únicas categorías no centradas exclusivamente en IA que experimenta este impulso. Seth Winterroth, socio de Eclipse, afirma que «el momento para invertir en robótica nunca ha sido mejor», citando la maduración del mercado y la mejora significativa de la tecnología.
Los actores y su repercusión
Inversores experimentados como Kira Noodleman, de Bee Partners, y Fady Saad, de Cybernetix Ventures, destacan que esta madurez es el resultado de más de una década de prueba y error. El abaratamiento dramático de los costes de hardware, en sensores, computación y baterías, ha creado el momento perfecto para soluciones robóticas integrales. Para el ciudadano, esto se traduce en una mayor adopción de la automatización en sectores con escasez de mano de obra.
El germen de la revolución robótica actual
El punto de inflexión histórico ocurrió en 2012 con la adquisición de Kiva Systems por parte de Amazon. Winterroth señala que esta operación «fue la adquisición que lanzó 1000 startups robóticas». Entre 2011 y 2016, surgió una primera ola de empresas que, si bien en su mayoría no tuvieron éxito, atrajeron talento ingenieril y permitieron aprender sobre el ajuste al mercado. Estos conocimientos se compusieron y se integraron en los siguientes proyectos emprendedores.
Un futuro automatizado, pero con matices
El impulso actual no significa que todos los enfoques estén perfeccionados. Los sectores más maduros y atractivos para los inversores son la fabricación, el almacenamiento, la construcción y, especialmente, la salud y la cirugía. Por el contrario, existe escepticismo sobre los humanoides y la robótica de consumo, un área con escasos éxitos comerciales. A pesar de que el creciente interés está elevando el coste de las operaciones, la mayor concienciación de los clientes representa un avance netamente positivo para el ecosistema robótico.