Junta de Tesla propone a accionistas paquete de pago de un billón de dólares para Musk
El Consejo de Administración de Tesla ha propuesto un paquete de compensación de un billón de dólares para su CEO, Elon Musk. La propuesta, que será votada por los accionistas en noviembre, establece una serie de hitos comerciales y financieros que Musk debe alcanzar en un periodo de 10 años para recibir el pago completo.
Los objetivos diluidos de un visionario
El paquete propuesto incluye metas que son versiones menos ambiciosas de las promesas previamente realizadas por el propio Musk. A pesar de que el Consejo presenta el plan como un camino para convertir a Tesla en «la compañía más valiosa de la historia», los hitos clave representan una revisión a la baja de sus proyecciones anteriores.
De la producción anual a la acumulada
Uno de los objetivos de producto es entregar 20 millones de vehículos en total, una meta muy por debajo de la promesa original de Musk de fabricar 20 millones de coches eléctricos al año para 2030. Tesla ya ha vendido ocho millones de unidades hasta la fecha.
La promesa de los robotaxis
Otro hito es lograr que un millón de «Robotaxis» estén en «Operación Comercial», definidos como cualquier vehículo Tesla que utilice el software de Conducción Autónoma Total (FSD). Esto contrasta con la afirmación de 2019 de Musk de tener un millón de robotaxis en carretera para 2020.
El futuro son los robots
El Consejo también le pide que produzca un millón de «bots» en total, en referencia al robot humanoide Optimus. Musk había prometido anteriormente fabricar un millón de estas unidades por año para 2029.
La suscripción masiva y el valor descomunal
La cuarta meta de producto es alcanzar 10 millones de suscripciones activas al software FSD. Además, los hitos financieros exigen que Musk lleve la valoración de Tesla a 8,5 billones de dólares y aumente las ganancias de la empresa a unos 400.000 millones de dólares anuales.
Un pasado de promesas incumplidas
El contexto del paquete surge de años de crecimiento estancado y luego revertido en las ventas de Tesla en 2024, lo que llevó a la compañía a abandonar sus promesas de crecimiento anual del 50% y el objetivo de fabricación de 20 millones de vehículos al año.
Un largo camino por delante
La viabilidad del plan depende de la capacidad de Musk para cumplir estos objetivos diluidos en un plazo de una década, mientras el Consejo exige garantías de que reducirá su involvemento en la esfera política y colaborará en un plan de sucesión para su cargo de CEO.