Inteligencia Artificial asume llamadas no urgentes en centros 911 de EE.UU.
Aurelian recauda 14 millones de dólares para su asistente de voz con IA. La startup despliega su tecnología para aliviar la sobrecarga en centrales de emergencia. La solución prioriza incidentes como robos de carteras o quejas por ruido.
Una mano robótica para el 911
La empresa Aurelian ha desarrollado un asistente de voz con Inteligencia Artificial que clasifica problemas no urgentes como quejas por ruido, violaciones de estacionamiento e informes de carteras robadas. Su sistema está diseñado para reconocer una verdadera emergencia y transferirla inmediatamente a un despachador humano. En otros casos, recopila información clave y crea un reporte para el departamento de policía.
Despliegue en múltiples condados
Desde su lanzamiento en mayo de 2024, el asistente de IA de Aurelian ha sido desplegado en más de una docena de centros de despacho 911, incluyendo aquellos que sirven al condado de Snohomish, Washington; Chattanooga, Tennessee; y Kalamazoo, Michigan.
La cruda realidad de los centros de emergencia
Los centros de llamadas de emergencia adoptan esta tecnología porque están consistentemente con poco personal, una consecuencia directa de que el despacho sea un trabajo de alta presión que se encuentra entre las 10 industrias con las tasas de rotación más altas. A menudo se pide a los despachadores que trabajen horas extras, con informes de jornadas de 12 a 16 horas en ciertos condados.
Nacido de una espera de 45 minutos
El origen de Aurelian se remonta a 2022, cuando su fundador, Max Keenan, trabajaba en una empresa que automatizaba reservas de citas para peluquerías. Una cliente suya fue puesta en espera durante 45 minutos al llamar a la línea no de emergencia de la ciudad. Esta experiencia llevó a Keenan a investigar y descubrir que estos centros son manejados por el mismo personal que atiende emergencias reales del 911.
Un aliado, no un reemplazo
La inversión de 14 millones de dólares Serie A, liderada por NEA, respalda esta solución. Un socio de la firma inversora destacó que «no estás reemplazando a un ser humano existente; estás reemplazando a una persona que querían contratar pero no pudieron». El objetivo declarado es permitir que estos telecomunicadores «tengan la oportunidad de tomar un descanso o ir al baño».